Caput medusae con Erizo de mar

Descrita por E. Morren en 1880.

Apuntes: Caput-medusae es un término latino que significa cabeza de medusa, en honor a la forma de la planta, cuando la colocamos cabeza abajo.

Tienen una cantidad de escamas muy variable. En la naturaleza se puede encontrar en grupos densos. Generalmente de un verde oscuro, propio de hábitats en sombra. En cambio si la especie proviene de zonas soleadas o áridas, las hojas se mostrarán de color verde grisáceo, que llegarán al blanco brillante en zonas muy áridas (Sonora, México).

Tamaño variable, entre 15 y 25 centímetros de altura. No sufre los efectos del geotropismo y puede crecer en todas las direcciones.

Está emparentada con la T butzii y la T. bulbosa.

Es una especie muy hermosa y de fácil cultivo.

Floración: despliega una inflorescencia corta, de color rojo brillante, donde se desarrollan las flores típicas violetas de forma tubular.

Iluminación: situar en zonas desde luminosas a soleadas.

Humedad y Riego: de moderado a débil. 1 vez a la semana en invierno y 2 veces a la semana en verano. Imprescindible el secado de la planta entre riegos.

Modo de cultivo: En suspensión o inclinada. No es una planta delicada, pero así evitamos riesgo de pudredumbre. En verano puede mantenerse en el exterior.

Fertilización: en verano 1 vez cada 15 días y en invierno una vez al mes. Utilizamos un fertilizante comercial y usamos dosis para plantas delicadas. Si no vienen indicaciones específicas para plantas delicadas, utilizamos un tercio de la cantidad indicada.

Hábitat: Se extiende desde México hasta Costa Rica, desde el nivel del mar hasta los 2.400 mts de altitud.

El aspecto general de la planta puede variar dependiendo de la estación del año y de su ciclo vital; así los tonos rojizos en muchas de las tillandsias se asocian a épocas de floración. 

Notas: Al igual que T. bulbosa, la caput-medusae es también mirmecófila (afinidad por las hormigas). En la naturaleza pueden convivir en colaboración mutua.